
Diciembre 25, 2017
LOS CASADOS SE PREOCUPAN EN AGRADAR A SU CÓNYUGE
Levíticos capitulo 8 nos deja ver la importancia de hacer los preparativos, ceremonia y ofrendas que agradan a Dios. Aarón y sus hijos eran lavados con agua, vestidos con vestiduras especiales, ungidos con aceite, ponían sus manos sobre un becerro mientras lo mataban, sobre dos carneros mientras lo mataban, presentaban las partes de los animales como ofrenda, comían las partes que se les ordenaba, y permanecían en el tabernáculo el tiempo que se les indicaba. Los participantes en esta ceremonia sabían lo que Dios quería, cómo lo quería y con qué actitud se debía llevar a cabo.
La relación con Dios esta simbolizada en mucho con la relación matrimonial. Por lo tanto, los participantes en el matrimonio deben de reconocer lo que se requiere, como se requiere y la actitud correcta. Si estas comprometido en la relación matrimonial, necesitas entender la importancia de agradar a tu cónyuge.
Para poder ser eficientes en agradar a nuestro ser amado, es posible que tengamos que realizar ajustes en nosotros mismo para lograrlo. Quizás esos ajustes tendrán que ver con dinero, tiempo, palabras, gestos, vestimenta, planeación, costumbres, pasatiempos, prioridades. 1 Corintios 7.33, 34 LBLA “el casado se preocupa… de cómo agradar a su mujer, la casada se preocupa… de cómo agradar a su marido.”
En una conversación entre muchachos surgió la pregunta: “¿Por qué les damos rosas a las chichas? Uno de ellos contestó: “No sé, solo sé que da resultado” En lo personal, reconozco que tengo el privilegio y la misión de agradar a mi esposa. Para lograr cumplir esta misión tengo que ser creativo y encontrar todo lo que de resultado. Esta misión es de cada día y así será hasta la muerte.
Nadie puede agradar a nadie si primero no se interesa en lo que le importa a esa persona. Si no nos preocupamos por conocer a nuestro cónyuge y lo que le agrada, nunca le agradaremos. ¿Qué tanto conozco acerca de mi cónyuge? ¿Conozco lo que le gusta comer, hacer, disfrutar, leer, ver? Si no, pues es tiempo de tener conversaciones más productivas que nos permitan conocer lo que le agrada a nuestro cónyuge. Conozco parejas que no saben cuál es la comida favorita de su cónyuge. Alguna vez hemos preguntado: ¿Qué es lo que más te disgusta de mí? Es probable que nunca hayamos hecho esta pregunta. Sería bueno escuchar la respuesta y, sobre todo, hacer los cambios necesarios.
¿Hace cuanto que no nos preocupamos por agradar a nuestro cónyuge? En como vestimos, en nuestro aseo personal, con nuestras invitaciones, con nuestra forma de hablar de él o ella, con nuestro apoyo, nuestra colaboración, y lo más importante, con nuestras oraciones. El agradar a nuestro cónyuge también tiene que ver con vivir una vida en santidad, apartados de los pensamientos de lujuria, abandonar vicios que nos hacen daño y le hacen daño a nuestra pareja, apartarse del egoísmo, dejar la envidia, buscando lo mejor para nuestro cónyuge, perdonándonos y tratarnos con paciencia.
Hagamos y utilicemos todo lo que sea necesario para hacer sentir estimada a su pareja. Todo esfuerzo sincero y con amor ayudará en la relación. Si lo vamos a hacer, háganoslo a la manera que a ella o a él le gusta.